jueves, 4 de octubre de 2007



No,
no tengo vértigo,
no tengo miedo
al agua,
ni a los lugares abiertos.

Tampoco
temo
los ascensores,
ser asesinado,
secuestrado,
linchado.

No tengo miedo
a nada
de eso.

Esto
va mucho
más allá.

Tengo
miedo
de no hacer nada,
¿entiendes?,
de no hacer nada.

Tengo
miedo
de perderlo todo,

la cabeza,
el dinero,
mi vida.

Todo.



NOTA: La actualización de hoy se la quiero dedicar al KEBRANTAVERSOS, que ha sido la primera persona que ha cogido un poema mío y lo ha querido colgar en su blog. Y bueno, para mí es un gesto que me recuerda que hay cosas que siguen mereciendo la pena. Desde aquí un gran abrazo para él.

No hay comentarios:

Publicar un comentario