viernes, 30 de junio de 2006


Noté que mis dedos sangraban,
que la música hacía estragos en mi cuerpo,
pero devorarte se había convertido
en mi pasatiempo favorito.

Cubriremos de gusanos los espejos,
y así cuando las hormigas se duerman en tu boca
abriremos las ventanas para echar a volar.

miércoles, 28 de junio de 2006


. En mi sonrisa se cuela la luz de tus días, y tu voz se agarra con fuerza a la comisura de mis labios.

. La noche fue dura con nosotros, y nos dejó esperando la lluvia de estrellas.

. En mi vaso se acumulan las notas que le sobraron a la noche. Tan solo es cuestión de afinarlas y así salir a bailar de nuevo.

. Dudo que un hombre pueda ser capaz de respirar si nunca pudo ser capaz de derramar una lágrima.

. En una vía de tren dejé en fila india colocados los objetos que llevaba en mis bolsillos. Ahora sólo conservo aquellos que supieron esconderse a tiempo.

......lo que da de sí un tren.....

domingo, 18 de junio de 2006



...ya sé que no es usual que escriba en el blog directamente, sino que lo lógico sería una vez más foto y texto... pero esta vez es algo diferente, esta vez le quiero dedicar esta actualización a una muy buena amiga... siempre es grato cuando alguien te dice aquello de "me acordé de ti..." y es por motivos buenos, pero si además te dicen que por lo que se acordaron de ti fue por los sueños, la ilusión, un piano... te hace sentir muy pero que muy afortunado...

... aqui os dejo el motivo de este post... a mi me encantó cuando lo ví...

...Muchas Gracias Maltieri...

sábado, 17 de junio de 2006


...¿Cuántas historias caben en una habitación de hostal? ...

...tal vez la nuestra sólo sea una más de las que llenan las paredes... y entonces tú irás y me susurrarás al oído que ya es demasiado tarde...

...pero siempre podré volver a observar la ventana desde la calle... aunque las flores no proyecten su sombra sobre la pared... a pesar de que he cambiado de ropa y el color de mi mirada se ha vuelto más oscura...

...lo extraño de todo esto es no conocerte... y por eso ahora viajo por ciudades infinitas... ya que me han contado que en una de ellas cada noche arde la misma cama...

martes, 13 de junio de 2006


Se giró, y encontró en la cama una ciudad en llamas, una estantería con libros, un veneno entre páginas. Una habitación 210, un reguero de sangre, un asesinato en cadena. Y con todo se tapó, para desaparecer para siempre, para acercarse cada vez más a si mismo. Pero los días se acababan, y desde fuera las luces aún no han aprendido a indicar el camino a seguir. Aunque siempre quedará el tiempo suficiente como para girarse y dormir sólo, para cerrar los ojos y abrazar su espalda una vez más.

Porque con miedo a las alturas nunca se huele el mar, porque un salto precipitado distorsiona los sentidos. Aunque hoy no nos reflejemos en el espejo y tan sólo podamos esbozarnos, aunque sin duda alguna dejemos de respirar cuando nos sentimos solos.

Y cada vez es más difícil y más fácil, más claro y más peligroso. Pero si sabemos elegir la ropa correcta, si sabemos abrir la ventana cuando el aire no nos lleve volando, tal vez entonces hayamos sabido leer en la dirección correcta, tal vez entonces el libro que escribimos acepte las palabras que le proponemos.

sábado, 10 de junio de 2006


Recuerdo que muchos días, cuando volvía del colegio, tú sacabas tu acordeón y empezabas a tocar sentado en el salón. Yo solía acompañarte cantando. Me gustaba la transformación que sufrían las canciones al pasar por tus manos, adquiriendo un nuevo ritmo, mucho más lento, mucho más melancólico. Y entonces, al rato, yo te decía que parases, que ya no quería escucharlas mas tiempo. Y era entonces cuando me cogías y me ponías a tu espalda mientras te echabas al suelo a hacer flexiones. Otras veces, para demostrarme tu fuerza, cogías a papa de los pies y le levantabas por los aires.