Para mí es bien sencillo: la vida debería vivirse al límite. Hay que revelarse, no someterse nunca a las normas, renegar del merito propio, no repetirse a sí mismo, ver cada día, cada año, cada idea como un verdadero reto y entonces uno logrará vivir la vida en la cuerda floja.
Philippe Petit.
ayer la vi, je,je, cómo me gustó. Todos hacemos equilibrios pero este hombre lo eleva a la categoría de arte, ¿no? Me parecieron bellísimas las imágenes, cuando parecía cruzar el cielo apoyándose sobre el vacío...
ResponderEliminarUn beso, guapo