Mi abuela compraba siempre en el mercado del Cabanyal
Una gran parte de mi infancia ha transcurrido
alrededor de sus calles
El Cabanyal necesita que se limpie,
que se arregle,
que se preocupen por él
pero NO que se derribe.
Salvem el Cabanyal
Una gran parte de mi infancia ha transcurrido
alrededor de sus calles
El Cabanyal necesita que se limpie,
que se arregle,
que se preocupen por él
pero NO que se derribe.
Salvem el Cabanyal
Si la carga policial de ayer contra los vecinos que intentabamos impedir un derribo ilegal hubiera sido contra los que dos calles mas abajo vendian droga a la vista de cualquiera... Si esa ingente cantidad de policia la mandasen a terminar con el problema de la droga... no habria entonces que derribar ninguna casa para "sanear" el barrio.
ResponderEliminarLas intenciones del Ayuntamiento son clarisimas: lo que les interesa es el suelo de este inocente barrio.
javi, lo que se tenga que hacer, dilo que allí estaremos los que podamos.
ResponderEliminardan ASCO la Rita Barbaritat i companyia, però asco es poco, es una impotencia la que sentimos los de allí (yo no soy de Valencia ciudad pero viví allí un tiempo, y al barrio del Cabanyal le tengo especial estima, viven amigos y gente que quiero), y ver que en las urnas se sigue eligiendo a los mismos y que ni Gürtels ni hostias, todo se olvida, es una rabia... ufffff
ResponderEliminarLas imágenes de ayer de la carga policial me helaron la sangre. Me dió miedo y me recordó cómo era este país hace años.
ResponderEliminarLo que están haciendo con ese barrio es una vergüenza.
Abrazo
Lo del Cabayal es una de esas cosas del fascismo democrático y urbanístico que no acabo de entender. El sanear una ciudad a ostia y porra como en los tiempos del invicto. Supongo que habrá por medio comisiones, gastos de representación, favores políticos... y 50.000 mierdas... además como en Valencia nunca pasa nada... nada de nada...
ResponderEliminarEspero que al final Barberá no se salga con la suya y se proteja y mejore esa joya arquitectónica de barrio.
ResponderEliminarEn fin, quizá pido mucho.